El sistema reproductor femenino se distingue por su estructura y funcionalidad únicas. Sin embargo, algunas enfermedades pueden alterar el mecanismo coordinado de los órganos. Una de esas patologías es el prolapso vaginal, que pone en peligro la vida habitual de las mujeres.
Contenido material:
- 1 Las razones de la omisión y el grado de desarrollo de la enfermedad.
- 2 Síntomas del desarrollo de la enfermedad.
- 3 Medidas diagnósticas
- 4 Prolapso vaginal y embarazo.
- 5 Métodos conservadores y quirúrgicos para el tratamiento de la patología.
- 6 Gimnasia y un conjunto de ejercicios terapéuticos.
- 7 Prevención del prolapso de las paredes de la vagina.
Las razones de la omisión y el grado de desarrollo de la enfermedad.
El prolapso de la pared vaginal (prolapso vaginal) ocurre por varias razones:
- Lesiones de nacimiento, recuperación defectuosa después del parto.
- Aumento de la presión abdominal (en el contexto de un trabajo físico agotador, cargas deportivas).
- Enfermedades gastrointestinales caracterizadas por estreñimiento.
- Dificultad para defecar.
- Patología del útero, creando una carga en el perineo.
- Problemas que se desarrollan después de la extracción del útero (extirpación).
- Obesidad
La razón de la omisión también puede ser provocada por la debilidad de los ligamentos, debido a las características genéticas o relacionadas con la edad de la mujer.
Por lo tanto, en pacientes de edad madura (especialmente aquellas que ingresaron después de la menopausia), la debilidad del músculo pélvico se controla con más frecuencia que en los jóvenes.
Síntomas del desarrollo de la enfermedad.
La ginecología moderna distingue 2 tipos de prolapso de las paredes de la vagina, provocados por ciertos factores fisiológicos: cistocele y rectocele.
El cistocele es un prolapso de la pared vaginal anterior, que provoca el desplazamiento de la vejiga y los músculos de la vagina, lo que provoca incontinencia urinaria. Esto último ocurre debido al vaciado incompleto de la vejiga, y la orina estancada es un medio adecuado para diversas infecciones.
El prolapso de la pared posterior de la vagina se llama rectocele. Esta afección se caracteriza por la sensación de un cuerpo extraño en la vagina, que impide que la mujer se siente y camine. Esta patología es provocada por la debilidad del tejido muscular del arco pélvico posterior. Además de un rectocele, puede causar trastornos de las heces, ya que se forma un "bolsillo" con heces acumuladas en el recto. El proceso de defecación se ve así impedido.
Existen 3 tipos de prolapso, según el grado de protrusión de la vagina desde la brecha genital:
- 1 (incompleto): el tercio inferior sobresale;
- 2 (parcial): el tercio inferior y medio sobresalen;
- 3 (lleno): toda la pared del órgano está abultada.
A menudo, el grado inicial de la enfermedad no es monitoreado por una mujer y solo puede detectarse con un examen exhaustivo por parte de un ginecólogo. Pero a veces, al comienzo del desarrollo de una enfermedad, las mujeres se sienten incómodas con la intimidad, el dolor en la parte inferior del abdomen, el flujo de sangre en la vagina y otros signos alarmantes.
En algunos casos, algunos síntomas se agregan a las características enumeradas:
- dificultad para orinar, defecar;
- incontinencia urinaria (más común en mujeres maduras);
- procesos congestivos en los órganos urinarios.
Las mujeres que han experimentado prolapso después del parto a veces sienten el llamado "abdomen inferior", provocado por la presión de la vejiga sobre el peritoneo.
Medidas diagnósticas
Para controlar los signos de prolapso vaginal, aplicamos varios métodos de diagnóstico:
- Recolección de historial médico y quejas. El médico aclara qué perturba al paciente, en cuyo caso la incomodidad se intensifica.
- Análisis de la historia obstétrica y ginecológica. Se tienen en cuenta las características del proceso de parto, el peso del bebé y la cantidad de embarazos.
- Análisis de la historia de la vida. Condiciones de vida, características de la profesión, presencia o ausencia de sobrecarga física, etc.
- Examen ginecológico.
Para un diagnóstico más preciso de los órganos pélvicos, se recomienda un procedimiento de ultrasonido.
Prolapso vaginal y embarazo.
A menudo, los tejidos vaginales se debilitan incluso antes del embarazo. Luego, durante el período de carga del niño, este problema puede agravarse a medida que aumenta la carga en la pelvis. La mayoría de los casos de prolapso vaginal están asociados con la presión del feto en crecimiento sobre el cuello uterino y su prolapso gradual bajo esta carga.
Tal patología puede ser extremadamente peligrosa para una mujer y un niño. Si la enfermedad no se detecta en las etapas iniciales, puede provocar un aborto espontáneo, en las últimas semanas de embarazo: parto prematuro.
Si el prolapso se detectó en las primeras etapas, por regla general, no causará problemas graves a una mujer embarazada. Cuando la situación es complicada, los médicos realizan procedimientos para reparar los órganos liberados para que no provoquen presión adicional.
Para prevenir situaciones peligrosas de prolapso vaginal, se recomienda a las mujeres embarazadas que realicen ejercicios especiales para los músculos íntimos en las primeras etapas de la gestación. Y también las futuras madres deben usar un vendaje especial de apoyo que no cree presión en la cavidad abdominal. Un método adicional para resolver el problema puede ser el uso de dispositivos de apoyo especiales ubicados directamente en la vagina. En algunos casos, se recomienda una combinación de todos los métodos anteriores para mujeres embarazadas a fin de evitar posibles complicaciones del prolapso vaginal.
Métodos conservadores y quirúrgicos para el tratamiento de la patología.
La terapia para el prolapso vaginal depende directamente del grado de prolapso y sugiere los siguientes métodos para realizar tácticas médicas.
Conservador
Implica una serie de actividades:
- entrenamiento muscular perineo;
- Terapia de ejercicio;
- la excepción del esfuerzo físico pesado;
- masaje ginecológico
Ortopedia
Implica el uso de pesarios: anillos de plástico colocados en la vagina y que sostienen sus paredes.
Quirúrgico
Los volúmenes y métodos de intervención quirúrgica se caracterizan por el grado del proceso de prolapso:
- Colporaphia: escisión o eliminación completa del exceso de tejidos vaginales y su posterior costura.
- Colpoperineorefia: eliminación del exceso de tejidos vaginales, su costura con un fortalecimiento adicional de los músculos pélvicos.
La más efectiva, en términos de resolver el problema del prolapso vaginal, es la cirugía.
Gimnasia y un conjunto de ejercicios terapéuticos.
Para evitar la posible pérdida de órganos reproductores femeninos, así como para mejorar la condición con la omisión existente, debe realizar gimnasia especial:
- Arrodillándose, apoyándose en los brazos rectos, contenga la respiración, voltee la espalda y baje la cabeza. Posición de bloqueo. Para reducir los músculos del perineo, después de intentar doblar la espalda lo más posible.
- Arrodillándose y descansando sobre sus manos, gire alternativamente la pelvis en diferentes direcciones durante 20 segundos.
- De pie / sentado con las piernas cruzadas, mientras exhalas, intenta desviarte en diferentes direcciones del pie.
- Sentado en una silla para redondear la espalda, mientras inhala, comprima los músculos del ano.
- Acostado en la parte posterior de la espinilla, colóquelo en una silla y coloque una almohada debajo de la pelvis. Arregla la pose por 5 minutos.
Además de estos ejercicios, puede realizar gimnasia íntima, diseñada específicamente para mujeres por Arnold Kegel.
Es conveniente porque es posible hacer movimientos de los músculos vaginales sin tener en cuenta el tiempo y el lugar. La alternancia de contracciones rápidas y lentas de los músculos íntimos, "empujar", levantar, relajar y otros ejercicios ayudará a fortalecer el sistema muscular de la pelvis. Debe comenzar con una pequeña cantidad de ejercicios, aumentando gradualmente la cantidad de movimientos y el tiempo de los ejercicios diarios.
Prevención del prolapso de las paredes de la vagina.
Para prevenir el prolapso de las paredes de la vagina y el prolapso posterior, se recomienda observar una serie de medidas preventivas.
Son los siguientes:
- Diagnóstico oportuno y terapia de la etapa inicial del problema.
- Limitación o exclusión completa del esfuerzo físico agotador, arrastrar y soltar, etc.
- Entrenamiento sistemático de los músculos del perineo.
- Mantener un estilo de vida saludable.
- Visita oportuna al ginecólogo (dos veces al año).
El prolapso vaginal es una condición fisiológica desagradable y peligrosa para las mujeres. Esta enfermedad empeora la calidad de la vida íntima de las mujeres y les causa muchos inconvenientes, provocando molestias físicas y emocionales. La buena noticia es que el prolapso y el prolapso de las paredes vaginales se pueden prevenir mediante el entrenamiento sistemático de los músculos vaginales y las visitas regulares al ginecólogo.