Si el niño tiene un exceso de energía, es importante poder dirigirlo en la dirección correcta. Cuando la creatividad no ayuda a llevar al bebé, el yoga para niños viene al rescate. Dichos ejercicios ayudarán a desarrollar flexibilidad, fortalecer los músculos y formar una postura hermosa.
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Los beneficios del yoga para el cuerpo del niño.
Las clases de yoga para niños contribuyen al desarrollo armonioso físico y mental del niño. Dicha formación será una gran actividad de ocio para los más pequeños. La principal diferencia con la capacitación de adultos es que las clases se imparten de manera lúdica, por lo que los niños no se aburrirán. Para cada asana, se construye una cadena asociativa que es comprensible para el niño, por lo que esta dirección desarrolla perfectamente la imaginación.
Además, el yoga contribuye a:
- fortalecer la columna vertebral;
- corrección de postura;
- normalización del trabajo de los órganos internos;
- mejorar las funciones cognitivas del cerebro;
- aumentar la inmunidad;
- desarrollo muscular
Al mismo tiempo, las cargas se pueden ajustar de forma independiente, por lo que estos ejercicios no agotan el cuerpo del niño, a diferencia de los deportes a lo grande.
El yoga para niños se recomienda para bebés con cifosis y escoliosis como una forma de corregir la postura de forma suave y delicada.
El beneficio del yoga para niños es fortalecer el cuerpo en general. Después de varios meses de clases regulares, también puede notar un aumento en el rendimiento escolar. Esto se debe a una mejor circulación cerebral durante el desempeño de algunas asanas. Además, el yoga mejora los procesos metabólicos y contribuye a la saturación de las células y los órganos con oxígeno, por lo que el sistema inmunológico se fortalece y los niños se enferman mucho menos.
Mejorar la concentración, fortalecer el aparato vestibular y mejorar la coordinación de movimientos: todo esto dará yoga para los niños. Esta dirección también le enseña al niño a construir relaciones armoniosas con el mundo exterior y desde una edad temprana inculca un estilo de vida saludable.
Cuándo y dónde comenzar las clases
Después de descubrir qué yoga es útil para el bebé, los padres deben hablar seriamente con el niño, y solo después de grabarlo en clase. Es importante explicar cómo se lleva a cabo la capacitación y qué objetivos persiguen. Los niños pequeños a menudo tienen miedo de todo lo nuevo, por lo que el resultado adicional dependerá de la capacitación brindada por los padres: el niño asistirá a las clases con placer o se sentirá profundamente infeliz, sin entender por qué esto es necesario.
Si la primera sesión de entrenamiento no impresionó al niño, los padres pueden dar el ejemplo al inscribirse en clases conjuntas.
Otro matiz importante es la falta de contraindicaciones. Se recomienda que antes del comienzo de la lección, un pediatra examine y consulte a un médico sobre los beneficios del yoga para el niño.
Es importante elegir ropa cómoda que no restrinja los movimientos. Además, es aconsejable consultar con un instructor y hablar con otros padres, cuyos hijos participarán en el mismo grupo. Esto es necesario para no darle al bebé accidentalmente un uniforme verde cuando todos los demás niños están vestidos de blanco. Es importante que los niños en edad preescolar no se separen de la sociedad, por lo que un poco como pantalones del color equivocado se pueden tomar con mucho dolor.
Un conjunto de ejercicios para niños de diferentes edades.
Las clases se recomiendan para niños de 4 a 7 años. Sin embargo, los niños de tres años pueden participar en una versión "lite" del yoga para niños. Dichas restricciones de edad se explican por el hecho de que los niños muy pequeños no entenderán el significado del entrenamiento y no podrán mantener la atención durante toda la lección. Además, los niños de 2 a 4 años son muy sensibles a separarse de sus padres, por lo que se sentirán incómodos en la sala con el instructor y simplemente se negarán a repetir los ejercicios.
Se recomiendan las siguientes poses para los más pequeños:
- "Serpiente": el niño se acuesta boca abajo, levanta el cuerpo y, apoyándose en las manos, estira la cabeza hacia atrás;
- "Gatito sentado": siéntate en el suelo, con las piernas bien separadas, los brazos descansando entre las piernas y tira del cuerpo hacia adelante;
- "Mariposa": siéntate derecho, dobla las piernas por las rodillas y presiona el pie izquierdo hacia la derecha.
Tales asanas simples se pueden realizar en casa con un niño de tres años. El entrenamiento debe llevarse a cabo de una manera lúdica. El padre debe pedirle al niño que represente al animal (de una lista preparada previamente) y luego corregirlo, enseñándole gradualmente al bebé las asanas correctas.
A partir de los 4 años, se practican las siguientes asanas para niños:
- "Abeja": párate derecho, respira hondo, dobla el cuerpo mientras exhalas, mientras la abeja zumba;
- "Gato" - parado a cuatro patas, fuertemente alrededor de la espalda, como un gato enojado;
- “Rana”: párate derecho, abre las piernas, luego coloca las manos en el piso entre las piernas, dobla las rodillas y salta un poco;
- "Tragar": pararse derecho, tomar una pierna hacia atrás, luego levantarla, mientras dobla el cuerpo paralelo al piso y extiende los brazos hacia los lados para mantener el equilibrio.
Si a un niño le gusta la tarea, se recomienda que lo inscriba en las clases de niños en un grupo. Esto beneficiará el desarrollo de habilidades de comunicación, además, con los compañeros, los niños serán mucho más divertidos.
Yoga para mamá y bebé hasta un año
Mamá y bebé pueden hacer ejercicios juntos. Hay una práctica especial para dos, que involucra asanas simétricas y es ideal para niños y padres.
Otra área interesante es el yoga para bebés. Es adecuado para bebés mayores de dos meses. Por supuesto, un niño a esta edad no puede realizar asanas por sí mismo, pero aquí las gentiles manos maternas vienen al rescate.
- "Mariposa". Acueste al bebé boca arriba, agarre los pies y júntelos, con un pequeño resorte en las rodillas.
- "Mariposa sobre mi estómago". Coloque al niño boca abajo, primero separe las piernas y luego júntelas, presionando los pies juntos.
- "Halotos". El bebé se acuesta boca abajo, mamá lo toma por la pierna derecha y la empuja hacia el muslo izquierdo. Luego repite con el pie izquierdo.
- "El triángulo alargado". Mamá se endereza, una pierna pone un lado, el niño presiona hacia un lado. Luego, la mujer se inclina en una dirección, empuja su mano hacia la pierna, el niño es presionado hacia el lado opuesto y, por así decirlo, "se va" para el movimiento de mamá.
Es importante tener en cuenta que el yoga para bebés solo se permite después del examen por parte de un pediatra. En general, los profesionales no recomiendan tales clases debido al riesgo de lesiones accidentales al bebé.
En la India, la patria de la práctica, la edad de preparación para el yoga es de 6 años.
Ejercicios de hamaca
El antigravedad, o fly yoga, es una nueva dirección para niños y adultos. Las clases se imparten en hamacas especiales, a aproximadamente medio metro del piso. Dado que la hamaca es fácil de comprar para uso doméstico, esta área está ganando popularidad rápidamente.
Sin embargo, no se recomienda que los niños dominen de forma independiente este tipo de yoga. El hecho es que una hamaca crea una falsa impresión de menos peso. Dado que los niños tienden a disfrutar y usarlo para sus acrobacias acrobáticas, existe una alta probabilidad de lesiones con la técnica de auto-dominio. En este sentido, se recomienda inscribirse en clases de hamacas en el gimnasio. El instructor hablará sobre seguridad y lo ayudará a aprender cómo realizar varios ejercicios para fortalecer el cuerpo y desarrollar flexibilidad.
Contraindicaciones para las clases.
Antes de registrar a un niño para yoga, es necesario someterse a un examen por un pediatra. Las clases de estiramiento están prohibidas durante los resfriados. Enfermedades infecciosas, fiebre alta, intoxicación y dolor abdominal: todo esto es una contraindicación para el entrenamiento. Es necesario abandonar las clases con alta presión intracraneal, miopía rápidamente progresiva e hipertensión arterial en un niño.
El yoga será una excelente manera de perder el exceso de energía. Si el bebé no estaba satisfecho con el hatha yoga clásico, vale la pena volver a intentarlo, pero esta vez en antigravedad. Como muestra la práctica, los ejercicios en hamacas montadas en el techo cautivan rápidamente a los niños en edad preescolar y primaria.