El autismo, o síndrome de Kanner, es un trastorno mental que ocurre en un contexto de baja adaptación social. Los niños con tal enfermedad no buscan interacción con el mundo exterior, están profundamente inmersos en sí mismos. En forma leve, este trastorno ocurre en aproximadamente 4 de cada 1,000 bebés, y los pacientes con signos severos de la enfermedad son significativamente menores. Consideremos en detalle qué es el autismo y cuáles son sus principales síntomas.
Contenido material:
- 1 ¿Qué es el autismo?
- 2 Causas del autismo en niños
- 3 Los primeros signos y síntomas de la enfermedad en un niño.
- 4 ¿A qué edad se diagnostica la enfermedad con mayor frecuencia?
- 5 Características clave por edad
- 6 Diagnóstico de la enfermedad.
- 7 ¿Qué pruebas ayudarán a identificar el autismo en un niño en el hogar?
- 8 Tratamiento de autismo en niños.
- 9 Métodos de enseñar a un niño a comunicarse
- 10 Cómo enseñar habilidades cotidianas
- 11 El pronóstico para un niño autista.
¿Qué es el autismo?
Durante muchos años, el autismo se consideró una forma de esquizofrenia infantil, pero ahora esta versión ha sido refutada. El síndrome de Kanner se clasifica como un trastorno mental caracterizado por una violación persistente de la relación del niño con la sociedad. Esta condición se debe a cambios patológicos en la corteza cerebral, pero la ciencia no ha podido establecer por qué ocurren.
En el curso de la enfermedad, el autismo se divide en varios tipos.
Puede ser:
- Típico En este caso, los síntomas de la enfermedad son notables a una edad temprana. Estos niños son indiferentes a la realidad y son curiosos, no responden bien a los estímulos externos y no buscan comunicarse con familiares u otros niños.
- Atípico Esta enfermedad no se hace sentir de inmediato, por regla general, sus síntomas aparecen más cerca de 3 años. Al mismo tiempo, es bastante difícil diagnosticar el autismo atípico, ya que los síntomas se expresan implícitamente.
- OcultoHay muy poca información sobre los pacientes con este diagnóstico, ya que los síntomas clínicos de este tipo de autismo son débiles e irregulares. Muy a menudo, los niños simplemente se consideran cerrados e insociables, atribuyendo todas las rarezas en el comportamiento a los rasgos de carácter.
Los signos de autismo en los niños dependen de la forma y la gravedad de la enfermedad, lo que dificulta hacer un diagnóstico preciso. Hay casos frecuentes cuando la enfermedad se detecta solo después de que se desarrollan síntomas persistentes que son difíciles de corregir.
Causas del autismo en niños
Los médicos no tienen una respuesta exacta a la pregunta, cuál es la causa del autismo y por qué surge. Se cree que los cambios patológicos en el cerebro debido a los cuales se desarrolla la enfermedad son causados por trastornos a nivel genético.
Relativamente identificado solo los posibles factores de riesgo.
La probabilidad de tener un bebé así aumenta en los siguientes casos:
- un padre mayor de 35 años;
- el embarazo se desarrolla en un contexto de patología;
- en el proceso de tener un hijo, el cuerpo de la mujer estuvo expuesto a influencias negativas (mala ecología, uso de drogas potentes, abuso de alcohol, cigarrillos o drogas);
- en la familia de uno de los padres, los niños con síndrome de Kanner ya nacieron;
- Entre los familiares hay personas que sufren trastornos mentales.
Había una teoría de que el autismo ocurre con mayor frecuencia en los bebés que son los primogénitos. Sin embargo, hay otra opinión, algunos científicos sostienen que con el advenimiento de cada nuevo miembro de la familia, aumenta el riesgo de que el próximo niño sufra de autismo.
Sabes Los niños son diagnosticados con esta enfermedad 4 veces más a menudo que las niñas. No se ha encontrado ninguna explicación para este fenómeno hasta la fecha.
Los primeros signos y síntomas de la enfermedad en un niño.
Los síntomas característicos del síndrome de Kanner incluyen los siguientes síntomas:
- Negarse a comunicarse con los demás. El niño evita el contacto no solo con adultos, sino también con sus compañeros, lo ignora cuando se dirige a él. Hablar con alguien primero por un paciente así es problemático y, si es necesario, experimenta una gran incomodidad.
- Interrupción de la interacción en la sociedad. Los niños autistas prefieren no mirar a los ojos de los demás, ignorar los juegos y actividades colectivas. Un niño con este trastorno a menudo es incapaz de señalar con el dedo lo que necesita. En cambio, usa la mano de una madre u otro pariente cercano.
- Uniformidad conductual y tendencia a ciertos rituales. Un niño con un diagnóstico de autismo puede reaccionar bruscamente ante cualquier, incluso una ligera desviación de la "zona de confort". Por ejemplo, puede ponerse nervioso al cambiar la ruta habitual de la tienda a la casa y crear una verdadera rabieta si el té no se vierte en la taza que solía usar. Los juegos que tales niños prefieren monótonos, a menudo les fascina el orden de los objetos, es decir, agruparlos por tamaño o color.
- Dificultades en el contacto verbal. Muy a menudo, en tales niños hay retrasos en el desarrollo del habla y, a veces, el bebé no habla en absoluto. Pero también existe la situación opuesta, cuando un niño por algún tiempo habla mejor que sus compañeros y luego deja de hablar. A veces, los autistas hablan frases elaboradas y poco naturales, y su discurso se caracteriza por la monotonía de la entonación.
- Ecolalia Este término se refiere a la repetición sin sentido de palabras y frases detrás del interlocutor. Es típico que los niños con síndrome de Kanner respondan una pregunta con una pregunta, y puede preguntar sobre lo mismo muchas veces seguidas, el niño reproducirá monótonamente lo que escuchó.
- Trastornos intelectuales. El retraso mental en los autistas es una ocurrencia bastante rara, y aproximadamente el 10% de estos pacientes se caracterizan por un desarrollo acelerado.Pero al mismo tiempo, los niños con este diagnóstico a menudo experimentan problemas de concentración y concentración, además, pueden estar interesados en una sola disciplina, por ejemplo, dibujar o cantar, e ignoran el resto.
- Embotando el instinto de autoconservación. Este fenómeno se llama autoagresión, muchos autistas específicamente se lastiman a sí mismos, por ejemplo, se muerden las manos antes de la sangre o el ataque. Además, están casi desprovistos de una sensación de peligro y pueden salir corriendo a la carretera o subir al alféizar de la ventana. Y después de haberse lesionado, el niño olvida inmediatamente la experiencia negativa y podrá repetir estas acciones más de una vez.
- Marcha extraña. Una característica distintiva de la mayoría de los niños autistas es una forma inusual de moverse. Algunas personas prefieren saltar mientras que otras caminan sobre los dedos de los pies, agitando los brazos, moviéndose con un paso adicional o balanceándose mientras caminan. En cualquier caso, tal bebé se caracteriza por cierta angulosidad y torpeza.
A una nota. Todos los síntomas enumerados en un paciente son bastante raros, como regla general, la presencia de 2 a 3 de los síntomas descritos es suficiente para sospechar autismo.
¿A qué edad se diagnostica la enfermedad con mayor frecuencia?
El diagnóstico de autismo se puede dar a un niño a partir de los 2 años de edad con signos pronunciados de esta enfermedad. Muy a menudo, los síntomas aparecen cuando se trata de socializar a un bebé, por ejemplo, enviarlo al jardín de infantes, cuando su "disparidad" con otros niños de la misma edad se hace evidente.
Pero el autismo puede hacerse sentir a una edad posterior, mientras que el nivel de desarrollo intelectual en un niño así será mucho mayor. En otras palabras, la enfermedad se diagnostica cuando aparecen síntomas obvios.
Características clave por edad
Dependiendo del momento de aparición de los primeros signos de la enfermedad, se divide en los siguientes tipos:
- Autismo en la primera infancia. Esta enfermedad se manifiesta antes de los 2 años de edad y se caracteriza por un bajo apego del bebé a la madre, una falta de respuesta a los estímulos sonoros en el estado normal de audición y un comportamiento inadecuado en respuesta a circunstancias externas. A menudo, estos niños prefieren jugar con cualquier tema, mientras que otros lo ignoran.
- Autismo infantil. Tal trastorno se diagnostica en niños de 3 a 11 años. Los pacientes con un trastorno similar a la edad de 3 a 4 años aún no hablan o pronuncian unas pocas frases, no muestran iniciativa en la comunicación y apenas dominan las habilidades elementales. Cualquier cambio en el entorno habitual causa miedo e irritación.
- Autismo adolescente Esta forma de la enfermedad se diagnostica de 11 a 18 años. Los adolescentes con este problema no sienten la necesidad de comunicación y en su mayor parte tienden a la soledad. Debido a la falta de comprensión de los sentimientos y estados de ánimo de otras personas, no pueden construir amistades o relaciones románticas, y la pubertad es mucho más difícil que en los adolescentes comunes.
Atencion Estos síntomas no siempre son evidencia de autismo, para hacer un diagnóstico preciso es necesario consultar a un especialista y realizar una serie de estudios.
Diagnóstico de la enfermedad.
En el proceso de diagnóstico, es principalmente importante diferenciar el autismo de otras enfermedades que pueden causar cambios similares en la condición del niño.
Para estos fines, tales estudios se llevan a cabo:
- consulta de un otorrinolaringólogo;
- Resonancia magnética
- CT
- electroencefalografía;
- Análisis de los niveles hormonales.
Y también las pruebas se llevan a cabo utilizando diversas técnicas que ayudan a llegar a una conclusión sobre el nivel intelectual del niño, sus reacciones y la gravedad de los síntomas de la enfermedad.
¿Qué pruebas ayudarán a identificar el autismo en un niño en el hogar?
El diagnóstico de autismo a veces es difícil incluso para médicos experimentados, y es imposible identificar esta enfermedad en el hogar.Pero hay pruebas con las que los padres de bebés a partir de la edad de 1,5 años pueden determinar qué tan alta es la probabilidad de tal violación en su hijo.
Deberá responder las siguientes preguntas:
- ¿Quiere el niño ser sostenido en sus brazos, arrodillado o mecido?
- ¿El bebé muestra interés en otros niños?
- ¿Le gusta subir a algún lugar, por ejemplo, subir escaleras?
- ¿El niño juega con los padres?
- ¿Puede el bebé señalar con el dedo un objeto que atrajo la atención?
- ¿Con qué frecuencia está ocupado el niño imitando alguna actividad, por ejemplo, conducir una máquina o preparar "comida" en un plato de juguete? ¿Lo hará si se lo piden?
- ¿Trae el niño artículos para mostrárselos a sus padres?
- ¿Con qué frecuencia un bebé mira a los ojos de extraños?
- ¿Se puede construir una pirámide o torre a partir de cubos?
Atencion Cuando la mayoría de las preguntas se responden negativamente, es muy probable que el bebé tenga autismo. En este caso, se necesita una consulta especializada urgente.
Tratamiento de autismo en niños.
Es imposible curar el autismo, solo queda ajustar el comportamiento del paciente e inculcarle ciertas habilidades.
Como parte de la terapia, se utilizan los siguientes métodos:
- clases en un logopeda;
- terapia conductual;
- integración sensorial (tratamiento de movimiento);
- terapia de arte (tratamiento de dibujo);
- terapia animal (tratamiento por contacto con animales);
- tomatois (el uso de sonidos para afectar la corteza cerebral).
Además, a los niños se les recetan medicamentos de los siguientes grupos:
- antipsicóticos;
- nootrópicos;
- tranquilizantes
- complejos vitamínicos
Además, a un niño se le puede recetar una dieta basada en la exclusión de alimentos con gluten y caseína. La prohibición se impone a los productos lácteos, productos de trigo, cebada o centeno. Para comprender cuán efectiva es la terapia de dieta, se deberán seguir las restricciones durante al menos 6 meses.
Métodos de enseñar a un niño a comunicarse
No solo los especialistas, sino también los padres deben participar en la adaptación social de un niño autista.
Para inculcar habilidades de comunicación en su bebé, debe cumplir con las siguientes reglas:
- En los juegos, dale el derecho al liderazgo y la iniciativa.
- Déle al niño la oportunidad de decidir cuándo termina el juego.
- Involucre a un niño en juegos con otros niños, sin prestar atención a sus emociones negativas.
- Cree regularmente situaciones en las que el bebé necesite contactar a las personas.
- Siempre elogie y recompense al niño por intentar comunicarse de manera independiente.
- Si el niño no habla, busque otras formas de "intercambiar información", por ejemplo, a través de gestos, expresiones faciales, sonidos o imágenes.
Atencion No haga algo en lugar de un niño si no lo pidió. Y tampoco ejerza presión sobre el bebé al tomar decisiones. Le toma tiempo sopesar todo y pensarlo.
Cómo enseñar habilidades cotidianas
Inocular las habilidades elementales autistas puede llevar bastante tiempo, por lo que los padres deben ser pacientes. No existe un método único para enseñarle a un bebé a lavarse las manos, cepillarse los dientes o poner las cosas en su lugar. Esto puede ser entrenamiento en forma de juego o por ejemplo personal.
Lo principal es observar las siguientes reglas:
- Antes de comenzar a dominar cualquier habilidad, muéstrele al niño las imágenes apropiadas o muéstrele varias veces cómo hacerlo.
- Realice acciones en secuencia estricta y no la viole. Por ejemplo, al lavarse las manos, primero apriete las mangas, luego abra el grifo y solo luego tome jabón.
- Repita las clases regularmente para que el niño se acostumbre a hacer algo.
- Comente las acciones en palabras, mostrando alternativamente su secuencia.
- Cuando desee enseñarle a un niño a usar el baño, es aconsejable que lo haga al mismo tiempo. No da miedo que al principio no salga nada, es necesario repetir estas acciones regularmente, acompañadas de explicaciones detalladas.
- Siempre elogie al bebé por el éxito, o proponga un "sistema de bonificación".
- No regañe si algo no funciona.
En muchos niños con síndrome de Kanner, la necesidad de realizar ciertas acciones causa irritación, pero no puede permitirse esto y abandonar las clases. Con el tiempo, el niño se acostumbrará y dejará de responder negativamente a las solicitudes de lavarse las manos o cepillarse los dientes.
El pronóstico para un niño autista.
En el caso del autismo, es difícil hacer predicciones sobre cuánto podrá adaptarse el niño al mundo que lo rodea. Pero uno debe estar preparado para el hecho de que nunca será "como todos los demás".
Solo el 10% de los autistas se vuelven relativamente independientes, hacen uno o dos amigos y no requieren el apoyo constante de sus padres.
Alrededor del 20% de los pacientes son bastante independientes, pero el nivel de su adaptación social no se puede llamar alto. La mayoría de las veces, estos pacientes prefieren pasar en casa, tratando de evitar la comunicación con extraños.
Aproximadamente la mitad de las personas diagnosticadas con autismo necesitan el apoyo de profesionales, y el 10-15% requieren atención especializada.
Es importante darse cuenta de que ser padre de un bebé autista significa cambiar completamente su vida. No es necesario comparar a un hijo o hija con otros niños sanos y preocuparse por ello. Es mejor disfrutar cualquier éxito de su hijo "especial" y ser su apoyo y apoyo.